CORRESPONDENCIA GRAFEMA-FONEMA

Buenos días a todas y todos,

hoy os traemos una nueva entrada con la que trabajaremos la competencia lingüística, concretamente, la correspondencia grafema-fonema y os preguntaréis...¿qué es eso? Muy sencillo, la correspondencia grafema-fonema es la capacidad que tenemos de conocer y asociar a cada sonido (fonema) uno o varios grafemas (letras). Por ejemplo, nos permite saber que al sonido /m/ le corresponde la grafía m; al sonido /k/ le corresponden las letras c o qu según la vocal a la que acompaña (/ka/ --> <ca>; /ki/ --> <qui>; etc.).

Es muy recomendable trabajar el mecanismo de conversión grafema-fonema una vez el niño/a domina la conciencia fonológica, es decir, cuando ya es capaz de detectar los sonidos que conforman las palabras y es capaz de decirlos en voz alta. Existen diversos estudios que demuestran que un niño/a no aprende a leer antes por mucho que le enseñemos el abecedario, salvo que haya sido capaz de adquirir adecuadamente la conciencia fonológica. De este modo, se recomienda trabajar primero la conciencia fonológica y después esta correspondencia entre grafema y fonema. Si estás interesado/a en trabajarla puedes consultar aquí unos ejercicios muy sencillos.

Recordad que el correcto desarrollo de la conciencia fonológica es clave para el desarrollo de lectoescritura y la prevención de dificultades de aprendizaje

A continuación, os proponemos una serie de tareas para trabajar la correspondencia grafema-fonema, con diferentes niveles de dificultad:

- Nivel inicial: el niño/a debe asociar la letra que se le presenta con el sonido o con el nombre de la misma a través de distintas actividades. En la primera de ellas se enseña la letra y debe decir su sonido, por ejemplo: el niño/a ve la A y debe decir /aaaaa/; en la segunda de ellas, en vez de decir su sonido debe decir el nombre: A; en la tercera de ellas, al escuchar el sonido debe señalar la letra que escucha; y, en la última actividad, debe escuchar su nombre y buscarla.


- Nivel intermedio: las actividades son las mismas que en el nivel inicial solo que aumentando el número de letras -y por tanto, de sonidos- que el niño/a debe identificar y asociar. Para añadir un poco más de dificultad hemos incluido una última actividad en la que el adulto va deletreando (bien diciendo el sonido o el nombre de cada letra) unas palabras y deben adivinar de cuál se trata.



- Nivel avanzado: en este último nivel, hemos aumentado considerablemente la dificultad añadiendo un par de tareas para formar palabras dada la letra inicial o dado un conjunto de letras. Hemos puesto tiempo para la resolución que podréis adaptar a cada caso e incluso jugar sin tiempo. 

Como os decimos siempre, esta entrada es una muestra de cómo trabajar la correspondencia entre las letras y los sonidos, con el objetivo de que vosotras y vosotros, desde vuestras casas podáis trabajarla de forma autónoma. Debería plantearse como un juego y que, éste, forme parte de vuestro día a día con los peques.

Esperamos que os resulten entretenidas, cualquier duda o consulta no dudéis en poneros en contacto con nosotras.

Un abrazo muy fuerte.

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